Catalunya no pudo doblegar a Túnez. El partido fue disperso a veces intenso en otras, suficiente para entretener a un público festivo y reivindicativo.
36.000 espectadores en las gradas
Al entrenador Cruyff le costo poner en funcionamiento a Catalunya. Aunque en la formación figuraban hasta 5 campeones del mundo.
El triángulo Xavi-Busquets-Cesc fomentaba la esperanza de contemplar un excelente partido.
Falto pegada. No hubo manera de ver un gol, ni con unos ni con otros, difícil de explicar si se mira la alineación.
Bojan recibe el premio al mejor jugador.
El entrenado Cruyff, el presidente Artur Mas y el alcalde de Barcelona Xavier Trias charlando en el campo.
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